Londres, 1888. Jack el destripador deja un sendero de sangre en las adoquinadas calles de la ciudad del Támesis. El inspector Abberline sigue incansable la pista del asesino.
Londres, 1888. Jack el destripador deja un sendero de sangre en las adoquinadas calles de la ciudad del Támesis. El inspector Abberline sigue incansable la pista del asesino.